El 'software' de segunda mano ha conseguido un importante triunfo legal en Suiza que le puede dejar vía libre en el resto de Europa.
El Tribunal del Cantón de Zug ha rechazado la solicitud de Adobe para que la empresa helvética usedSoft,
dedicada a vender licencias ya utilizadas de 'software', dejara de
vender sus productos porque infringía su 'copyright' y derechos de marca
registrada.
La sentencia de la corte helvética es la primera que se produce en Europa con respecto a 'software' en soporte tangible, es decir, en CD.
El Tribunal de Zug se ha basado en el llamado "principio de agotamiento de derecho", que la Unión Europea amplió a los programas informáticos de manera específica en 1993.
Comprar un programa ya usado puede suponer un ahorro de entre el 20% y el 50%
Suiza también se adhirió a dicha directiva, que establece que un
fabricante no puede prohibir la venta de los ejemplares de sus
programas una vez hayan sido vendidos por primera vez en el espacio
económico europeo.
Para que se entienda mejor: de la misma manera que es legal vender un
coche de segunda mano, es legal también vender un programa que hayamos
adquirido de forma lícita y ya no utilicemos.
El juez que llevó el caso fue tajante al declarar que a Adobe sólo le interesaba "la pérdida de porcentajes del mercado".
Si el fabricante no apela la decisión del Tribunal de Zug o si lo
hace pero la corte la ratifica, la sentencia sentaría jurisprudencia en
Suiza. No obstante, los expertos consideran que esta decisión tendrá un efecto evidente sobre el resto de jueces de la Unión ya que esta materia ha sido objeto de armonización a nivel europeo a través de diversas directivas.
Otras victorias
La demanda de Adobe no es la primera a la que se enfrenta usedSoft. El primer enfrentamiento lo tuvo con Oracle en Alemania, y todavía no ha acabado.
En este caso, se refiere a la reventa de 'software online', regido
por una directiva diferente. El Tribunal Federal de Alemania ha
planteado una consulta ante el Tribunal Superior de las Comunidades
Europeas (TSCE) para que se pronuncie al respecto.
En Estados Unidos y en Japón, el 'software' de segunda está prohibido.
Ahora, los grandes fabricantes de 'software', como Microsoft, Oracle y
Adobe, se han puesto las pilas para conseguir lo mismo en el Viejo
Continente. Se juegan mucho dinero y, por eso, llevan semanas haciendo
lobby al más alto nivel europeo.
La sentencia del Tribunal de Zug puede hacer que aumente aún más esa presión ya que potenciará el negocio de reventa de licencias.
Si los servicios de las empresas de 'software' de segunda mano se
extienden y los clientes saben que están protegidos jurídicamente, los
fabricantes del producto original venderán menos.
Según fuentes legales cercanas a estos grupos de presión, los países
europeos no comparten un punto de vista único sobre esta cuestión, por
lo que están haciendo llegar su visión al TSCE antes de que se pronuncie
sobre el caso Oracle contra usedSoft.
Más allá de la pérdida de ventas, detrás de las preocupaciones de los fabricantes está, como siempre, la 'piratería'.
Los detractores de la reventa de programas ya usados lo comparan a que
alguien poseyera las planchas de la imprenta de un 'best-seller'.
Un negocio en aumento
Las empresas de venta de 'software' de segunda mano están
incrementando su número de clientes de manera exponencial. usedSoft
nació en 2003 en Zug y ya cuenta con más de 2.000 clientes, todos ellos empresas, y 11.000 licencias en stock.
Comprar un programa ya usado puede suponer un ahorro de entre el 20% y el 50%, dependiente de lo antigua que sea la versión y del número de licencias que se compren.